Lecturas Juveniles Colrosario

Nací en unas circunstancias muy malas.  Sentí cuando una persona muy cercana llenó el cordón umbilical de grasa.  En aquel momento sentí cómo me alejaban el resto de mi vida de mi mamá, y sentí inseguridad por no estar en sus brazos.  Era impotente; no puede hacer nada.

Cuando me dí cuenta que mi padre era mi asesino, me decepcioné totalmente de él, porque por amor hubiera dado la vida que él me quitó para salvar la de él.

Era una tarde lluviosa.  Estaba tomando una taza de café.  Me había decidido a buscar a mi amada.  Tiempo atrás me había abandonado por mis problemas con el alcohol.  La búsqueda núnca resultó.

Fuí a casa y tres tragos de whisky fueron mi compañía hasta la llegada del anochecer.  Con el último trago que bebí sentí caer mi cuerpo levemente al piso.  Caí inconsciente.  En ese momento nada podía igualar la calma que sentía.  Y de repente...

FINAL

...causa del desespero por su soledad.

Tomó un cuchillo y cortó su cuello, sintiendo lentamente el placer de observar cómo corría la sangre por sus manos.  Disfrutó ver las lágrimas caer por las mejillas de su padre.  Amaba el silencio que producía su muerte.

Ana María Salazar

Valentina Villada

"Aquí yace Jacques Olivant que murió a los 51 años.  Mató a su padre a los treinta años con una pica, y sus restos descuartizados los metió en un baúl y los tiró al mar.  Su madre, al enterarse, huyó, pero él la alcanzó para matarla. Nunca quizo a su familia.  Fue deshonesto, y se suicidó al verse perseguido".

El esqueleto se fué acercando hacia mí, y yo en shock no reaccioné. Me quedé quieto.  Él se sentó a mi lado y empezó a contarme el motivo del suicidio sin yo haberle preguntado.  Me dijo que veinte años después de haber asesinado a sus padres, un marinero encontró un cuerpo en un baúl y otro envuelto en una bolsa.  Fueron llevados a la policía donde un detective estuvo a punto de encontrar al culpable. 

Me dijo que él no había estado dispuesto a quedar preso, y quizo la muerte.  También me dijo que los muertos no descansan en paz hasta que toda la verdad sea revelada".

"Cada 31 de octubre salimos de nuestras tumbas para tallar con nuestras manos la verdad del secreto que aún no nos deja descansar en paz". 

-Lo vi, lo vi sentado al frente de una tumba con su rostro triste y sus ojos hinchados de llorar. 

...La culpa, mi culpa que me atormenta día a día desde que fallecí. 

Tallé con mis dedos, así como todos mis compañeros de la ciudad de los muertos, la verdad de mi gran pecado: Haberle sido infiel a mi amor verdadero..."

Profundización en los personajes del cuento de Guy de Maupassant "¿FUE UN SUEÑO?"

Alumna de 11º1

Con una sombra de dolor empezó.  La vida nos reclama algo bueno; siempre nos pide obras.  Tu vales por lo que haces.  Si eres malo, sólo eres un perjuicio.  Un alma homicida clama dentro de mí, y la felicidad parece estar tan lejos, tan inalcanzable.  La vida no es una vida si no se vive, y hoy temo vivir porque estoy muerto, sumergido en un mundo de desilusiones.  No entiendo por qué todos los muertos se sepultan, y entonces viven; por qué quedan en la memoria solo los gestos de valor que cubren tantas experiencias  repugnantes que hoy parece que solo yo las llevo en mente. 

Muy dentro de mí, mi ser añora el día en que pueda ver la realidad, pero temo que sea mala, porque lo único bueno que me quedaba yace sepultado con una maldita lápida encima.  Ya la vida no tiene sentido, y es por eso que no estoy vivo... porque no tengo el goce de vivir.

Ahora es cuando más comprendo que estoy más muerto que vivo.

PROFUNDIZACIÓN en un personaje del cuento ¿fué sólo un sueño? de Guy de Mauppassant.

Estudiante del grado 11º1

"Tomé el abrigo y salí corriendo entre las oscuras calles de París, y terminé en el parque en el que alguna vez la habría visto por primera vez, tan serena, tan resplandeciente... Donde con sólo una mirada me enamoró.

Sus ojos tan profundos y brillantes, llenos de vida y amor en ese entonces.  Allí habría comenzado nuestra historia, esta misma historia que se terminó con su leve y débil suspiro que fué la señal de nuestra separación inevitable.  Ahora esta tristeza que me invade llena de temores mi alma, esta soledad, la falta de su presencia.

Resulté caminando de vuelta a casa, tratando de enfrentar la desolación.  Me senté en aquella cama que alguna vez fué de los dos, y en aquel momento sentí su calor y su dulce perfume rodearme.  Sabía que aún estaba allí.  Llevé mi mirada hacia la luna que asoma por mi ventana, y entendí que este no podía ser el fin de nuestro amor.  Me miré al espejo y comprendí que debía estar a su lado.  Entré a la tina llena de agua, y vi caer las gotas de sangre sobre ésta, sumergiéndome en un sueño profundo.  Debía estar junto a ella, y ahora podía verla frente a mi.  Vivo o muerto necesitaba de su amor.  Le dije mirándola a los ojos: Ahora estaremos juntos por toda la eternidad".

ESRITURA CREATIVA DE FINALES ALTERNOS:  Tras la lectura parcial del cuento ¿Fué un sueño? del autor GUY DE MAUPASSANT, Jessica Alejandra Ruiz y Maira Alejandra Villada del grado 11º1 (el pasado 9 de junio) presentaron la propuesta de un final diferente al dado originalmente por el novelista francés.